Más que… 11

Eres más feliz que Gepeto con la Balck and Decker.

Eres más feo que Prosineski en un Twingo.

Eres más feo que Rappel en tanga bailando una jota.

Eres más feo que el Fary chupando limones.

Eres más feo que el Fary mirando al sol.

Eres más instantáneo que un vaso de leche con Nesquik.

Eres más inútil que la compresa de Bibi Andersen.

Eres más inútil que el logopeda de Rambo.

Eres más inútil que la primera rebanada del pan Bimbo.

Eres más inútil que una nevera en el Polo norte.

El perro del universitario

Un chico norteamericano se va una universidad en los Estados Unidos y a la mitad del primer semestre se le acaba el dinero que le dieron sus padres para ese periodo. Se le ocurre entonces una idea brillante y llama a su padre.
– Papá, no vas a creer las maravillas modernas de la educación en este sitio. Resulta que aquí en mi Universidad tienen un programa para enseñar a hablar a los perros
– ¿Y cómo puedo hacer para que acepten a Pluto, el perro de la casa?
– Solo envíamelo con $1.000 y yo me encargo de matricularlo
Así es que el confiado padre envía al perro con los $1.000. Poco antes de acabar el semestre, el muchacho se gasta el dinero de nuevo y decide volver a llamar a su padre.
– Bueno, y ¿cómo le va a Pluto?
– Increíble, papi. Ya habla hasta por los codos, pero ahora resulta que hay otro curso más avanzado, para enseñar a los perros a leer
– ¡No jodas! ¿Y cómo hago para que entre a ese curso?
– Solo envíame $2.500 y lo matriculo en ese nuevo curso
Así es que el ingenuo padre le envía el dinero. Al final del curso, el chico se da cuenta que el perro no sabe ni hablar ni leer, así es que le pega un tiro al perro. Cuando llega a su casa al final del semestre, el padre está feliz, esperándolo.
– ¿Dónde está Pluto? Estoy deseoso de escucharlo hablar y leer. Ya tengo separada una revista de animales para que me la lea
– Papá, no me lo vas a creer. Ya lo tenía todo preparado para el viaje, cuando lo veo acostado en el sofá, leyendo el New York Times, como todas las mañanas. De pronto me dice, “Bueno, ¿y tú viejo se sigue tirando a la pelirroja esa que vive enfrente de la casa?”
Y el padre le contesta:
– Espero que le hayas pegado un tiro a ese perro hijo de puta, antes de que hable con tu madre
– Claro, papi ¡Eso fue exactamente lo que hice!
– Así se hace, hijo
El chico se graduó y se convirtió en un político exitoso.

El butanero

Un marido le dice a su mujer:
– Fíjate si es chulo el butanero que dice que se ha acostado con todas las mujeres de esta casa menos con una
– Sí, será la imbécil del tercero

Los misterios de Heidi

¿Cómo puede el abuelo de Heidi mantener un chalet en la sierra y a una familia con la pensión de un jubilado?

¿Qué hace clarita trotando por el monte en silla de ruedas?

¿Está preparada la casa de Heidi para esa minusvalía?

El burro y la suegra

Un cuñado se encuentra con otro cuñado en un funeral y ve mucha gente. Éste le pregunta:
– ¿Qué sucedió cuñado?
El otro le responde:
– Es que mi burro mató a mi suegra de una patada
Entonces se asoma y ve tanta gente en el velatorio que se le ocurre preguntar:
– ¿Y toda esa gente conocía a tu suegra?
El otro le responde:
– No… vinieron a comprar el burro