Análisis de Redout



Analizado en Xbox One. Copia digital proporcionada por 505 Games.
RedOut

es conocida en nuestro idioma como la “eritropsia” o “visión roja”, que no es otra cosa que una alteración en la percepción de los colores de carácter temporal. Vemos las cosas teñidas con un tinte rojizo, que parece colorear todo lo que vemos. Se trata de un trastorno temporal que puede darse en múltiples situaciones, entre ellas, al pilotar un avión de alta capacidad y realizar maniobras bruscas al ir en picado. En 34BigThings han pensado que sería un nombre ideal para su último videojuego, un primo hermano de la serie

Wipe Out

que llega ahora a las consolas de sobremesa tras su estreno en PC el año pasado.

Pocas veces se acertó tan de lleno con un nombre. Este estudio de desarrollo afincado en Italia no ha tenido grandes aciertos en sus proyectos anteriores, porque ni las peripecias de OttO el hámster en los smartphones ni el multijugador para cuatro jugadores Hyperdrive Massacre han calado entre el respetable. Pero RedOut ha dado de pleno en la diana. En PC está considerado uno de los mejores títulos del género, mientras que el vacío que existe en Xbox One y Nintendo Switch (por lo menos hasta que F-Zero sea una realidad) lo convierten en un título a tener muy en cuenta. En PlayStation 4 tiene competencia con ese maravilloso placebo que ha resultado el recopilatorio de Wipe Out, pero ése es otro tema. RedOut es adrenalina en vena.

RedOut es un juego de carreras con naves antigravitatorias es circuitos imposibles, de esos que se retuercen y nos ponen bocabajo a cada momento. Sí, tiene multijugador en línea para que hasta seis jugadores se batan el cobre en partidas igualadas y privadas, pero lo mejor de todo es que también ofrece carreras a pantalla partida para que montemos un campeonato con amigos en casa. Completa la oferta las carreras contra la inteligencia artificial, una chuchería que se queda en nada cuando acometemos el modo “Trayectoria”. Porque es en este impersonal modo historia sin argumento donde se cuece todo. Una sucesión de eventos de diferente índole agrupados por categorías, cuatro concretamente. Cada una restringe un tipo de nada de cada escudería. Cada prueba puede superarse con un “bronce”, pero lo suyo es que ganemos el “oro” en cada una para acumular más y más dinero.

Porque como ocurre siempre, todo tiene un precio. Desde adquirir los potenciadores activos (que se desencadenan al pulsar el botón correspondiente) como los pasivos (no hay que hacer nada para notar sus efectos) con sus correspondientes mejoras, hasta las naves del resto de marcas así como los nuevos modelos para dar el salto en cuanto a cilindrada se refiere… para todo esto hay que pasar por caja. Realmente las primeras carreras resultan muy asequibles, sobre todos las carreras contra otros naves. Conseguir los mejores registros en las pruebas cronometradas es otro cantar, igual que el primer salto de categoría: tocará invertir bien el dinero en las mejoras si no queremos ver a nuestros rivales pasarnos como si fuéramos tortugas en una autopista.

Análisis de The Flame in the Flood: Complete Edition

Analizado en PlayStation 4. Copia digital proporcionada por VIM Global Consulting.

Hace ya casi un año que The Flame in the Flood aterrizó en Steam y Xbox One. Ahora le ha llegado el turno a su respectiva versión de PlayStation 4 con su edición Completa. Nos encontramos ante un título de Supervivencia en el que han participado entidades como el director de Arte de Bioshock o ciertos miembros de los equipos que trabajaron en Halo o Guitar Hero.

The Flame in the Flood ofrece una experiencia de supervivencia en la que la búsqueda de recursos, el crafteo o combatir la naturaleza son los pilares más importantes de la aventura. Nos ponemos en la piel de Scout y contamos con la ayuda de Esopo, un perro que aparece con una mochila cuando todo da comienzo. Tenemos que recorrer cantidad de localizaciones para poder encontrar lo necesario para seguir con vida, pero para llegar de un lugar a otro lo debemos hacer navegando por el río. Tener cuidado con los peligros que nos encontramos mientras vamos por el agua también es otra de nuestras ocupaciones. Si nuestra embarcación sufre daños podremos morir si no encontramos las herramientas para repararla.

Aunque sobrevivir es nuestra principal misión, averiguar de dónde ha salido Espo y la mochila que porta es el segundo de los sentidos que la desarrolladora ha querido dar a la experiencia de juego. Si morimos tenemos que volver a empezar de cero y contamos con la posibilidad de hacerlo con los mismos objetos que habíamos introducido en la mochila del perro antes de caer. Cada cierta distancia del río también se guarda un punto de control para poder volver a aparecer en este lugar con las mismas condiciones que cuando habíamos pasado por allí.

Como en todo título del género la obtención de recursos es uno de los propósitos que más importancia cobran, aunque pronto nos damos cuenta de que nuestra mochila no tiene capacidad infinita y decidir sobre lo que llevar encima o no es un dilema fácil de superar. Por si fuese poco el río y sus peligrosas corrientes no serán el único problema con el que nos vamos a topar. Hay animales salvajes que nos atacan cuando nos los encontramos o los intentamos cazar, así como debemos filtrar el agua para no enfermar o incluso debemos descansar para recuperar fuerzas. El clima es otro de los problemas, y cuando llueve, ya sea estando en una localización concreta o navegando, nuestro cometido es buscar refugio. El modo principal de juego cuenta con 10 regiones diferentes, mientras que el modo infinito ofrece eso mismo que le da el nombre, una consecución de escenarios que termina cuando el jugador ve caer su medidor de salud a cero.

A nivel artístico nos encontramos con un juego bastante pintoresco y bonito, incluso algo tenebroso cuando somos atacados por algunos animales salvajes o es de noche y llueve. En cuanto a la banda sonora también entra en los términos de sencillez que aporta el conjunto de lo ofrecido, pero sin lugar a dudas está muy acorde con la ambientación Norte Americana que se presenta.

Conclusiones

The Flame in the Flood: Complete Edition ofrece la misma experiencia de juego que el título original, pero esta vez en PlayStation 4 y con el aliciente de varios skins para los protagonistas, así como ciertas mejoras, un tema dinámico para la interfaz de la consola y los comentarios del director. Sin lugar a dudas se trata de una experiencia de supervivencia bastante peculiar y recomendada para todos los fans del género. No es para nada una experiencia sencilla, por lo que hay que ir aprendiendo los fundamentos y las opciones del juego poco a poco.

La cantidad de elementos que se pueden descubrir. Su dificultad.

Poca varidad de modos de juego, se hace algo pesado con el tiempo

El género de la Supervivencia tiene un nuevo fichaje en PlayStation 4. Una gran propuesta con una gran curva de dificultad.